Chile supo superar la pretensión socialista marxista de Salvador Allende el fascismo militarismo de Augusto Pinochet y también superará la actual situación de violencia preparada, financiada por intereses extraños y foráneos a los chilenos
escrito por LUIS ALBERTO MACHADO SANZ
Abogado
@caballitonoble
1- El primer presidente que tuvo Chile luego del retorno a la democracia fue el demócrata cristiano, Patricio Aylwin Azócar, luego vino el también demócrata cristiano Eduardo Frei Ruiz-Tagle (antes dijimos e hijo del también Presidente Eduardo Frei Montalvo), a continuación vino el socialista Ricardo Andrés Lagos Weber que había sido ministro de obras públicas de Eduardo Frei Ruiz-Tagle, luego de este lo sucedió la socialista Michelle Bachelet que había sido ministra de la defensa, continuó el derechista Sebastián Piñera, posteriormente otra vez vino Michelle Bachelet y al momento de escribir estas líneas está otra vez Sebastián Piñera
Es de notar que hasta que ganara la primera vez Sebastián Piñera, hubo una suerte de “Pacto político Chileno” que se denomina “La Concertación”, Fue una “coalición” entre socialistas y demócratas cristianos que le han permitido a ambos partidos tener dos presidentes demócratas cristianos dos socialistas, con Piñera la concertación ha perdido dos veces.
2- De la actual época democrática de Chile, vamos a resaltar un hecho:
En un momento dado hubo un problema entre Patricio Aylwin y Pinochet. Para ese momento Patricio Aylwin era presidente y Pinochet era comandante general del ejército (el cargo militar más importante en Chile. para ese entonces, no era ni sigue siendo el de ministro de la defensa, sino el de comandante general del ejército)
Debido al conflictivo que se presentó entre ambos, el presidente Aylwin le pide al general Pinochet que renuncie al cargo de comandante general del ejército pero Pinochet le contesta lo siguiente:
"Si yo salgo de este puesto los mismos militares que tumbaron a Allende lo van a tumbar a usted también. Mal que bien, me obedecen y me respetan. Por lo tanto yo los controlo. Si usted quiere seguir siendo presidente me tiene que dejar aquí donde estoy. De lo contrario lo tumbaran"
3- La Constitución chilena de 1980 le permitía a Pinochet que luego que abandonara la presidencia quedara como comandante general del ejército y luego de abandonar la comandancia del ejército quedara como senador. Era una Constitución a su medida que con el tiempo tuvo que sufrir sustanciales reformas y modificaciones pero que mientras Pinochet pudo, Pinochet le sirvió como una camisa a su medida.
Pues bien, siendo Pinochet senador, el 21 de septiembre de 1998, Pinochet viaja a Londres con el fin que los médicos le realizaran una operación de hernia discal lumbar, iba acompañado de un nieto y 10 de octubre del mismo año, aparece en escena el juez Baltazar Garzón, juez de la Audiencia Nacional de España quien manda a detenerlo en Londres, el juez Garzón alegaba que existían indicios suficientes para ordenar una de captura contra Pinochet debido al asesinato, tortura y violación de derechos humanos de unos ciudadanos españoles, presuntos crímenes de lesa humanidad cometidos en Chile durante el mandato de Pinochet y que por lo tanto, Pinochet debía ser extraditado a España para responder por dichos crímenes.
Para ese momento el presidente chileno era Eduardo Frei Ruiz-Tagle, el primer ministro inglés era Tony Blair y el presidente del gobierno español era José María Aznar.
Evidentemente, se trataba de un caso jurídico mezclado con lo político, en este caso lo jurídico y lo político iban tan pegados como la estampilla y el sobre y como la uña y el sucio. Este fue el típico caso en que se mezcló el derecho internacional público y el derecho internacional y la política nacional con la política internacional.
Como manera de protesta la fracción parlamentaria chilena que era compañera de Pinochet hizo huelga, dijeron que hasta que Pinochet no volviera a Chile, no acudirían a las sesiones parlamentarias; en dos palabras: una huelga de parlamentarios.
Mientras se resolvía el conflicto en relación a la detención de Pinochet, éste fue detenido preventivamente, no fue detenido en una cárcel con barrotes, tampoco estuvo confinado en una penitenciaría, Pinochet estuvo preso de una manera privada, cuidado por la famosa Scotland Yard, fue visitado por Margaret Thatcher, “la dama de hierro". Pinochet no estaba “preso” propiamente dicho sino en “arresto domiciliario”.
Chile tenía que resolver “el problema Pinochet” y para eso se buscó una solución política, al fin y al cabo estaban implicados tres países: España, Reino Unido y Chile.
La solución política que se negoció entre estos países entre fue que Pinochet volviera a Chile, que no fuera a España pero que fuera a Chile y en Chile fuera juzgado por los crímenes por los que juez Baltazar Garzón pedía que fuera juzgado, para ello tenían que “desaforar” a Pinochet; es decir quitarle su inmunidad como senador.
Y en efecto, Jack Straw, para ese entonces ministro de relaciones exteriores del Reino Unido, autoriza que Pinochet retorne Chile y llega de vuelta a Chile el 2 de marzo del año 2000.
Bueno, al volver a Pinochet comienza una batalla legal ya que la defensa legal y política de Pinochet alegó “motivos de salud” para que no fuera desaforado y sucedieron dos hechos insólitos y paradójicos:
A) La defensa legal y política de Pinochet alegó que pretender desaforarlo estando enfermo y anciano era “violar sus derechos humanos”
¡Caramba!
El que no respetó derechos humanos ahora alegaba derechos humanos y además los podía alegar porque Chile había vuelto a la democracia (desapareció muchas personas y tuvo jueces a su mandato que llevó a muchos chilenos a ser condenados mediante juicios sumarios, no permitiéndoles ni siquiera alegar derechos humanos) t
B) La batalla legal y política por enjuiciar a Pinochet duró 6 años. La defensa legal y política empezó a ejercer recursos legales y políticos para alargar el desafuero y posterior enjuiciamiento de Pinochet, recursos que pudieron ejercer por estar Chile en una democracia (recursos que no permitieron que ejercieran sus enemigos y adversarios ya con Pinochet se vivía en dictadura).
El resultado final aquella pugna judicial y política por enjuiciar a Pinochet fue que a Pinochet no lo enjuiciaron porque se murió y lo insólito y paradójico del caso es que Pinochet muere el día 10 de diciembre de 2006, día de la conmemoración mundial de los derechos humanos, el que no respetó derechos humanos, muere el día de los derechos humanos
El hecho que un violador de derechos humanos como lo fue Pinochet haya alegado en su defensa que le estaban violando sus "derechos humanos" nos trae a la mente una reflexión muy importante para todos los violadores de derechos humanos, criminales de lesa humanidad, represores, torturadores, asesinos, sicarios pandilleros que se ponen al servicio cualquier dictador sea de izquierda o sea de derecha:
Que lean la historia y vea como terminan los dantones y robespieres que terminaron guillotinados con la cabeza cortada por la misma guillotina que le aplicaron a otros para cortarles sus cabezas, que vean el patético espectáculo de andar de mendigos de asilos políticos de misericordia tal cual el que se arrodilla pidiendo limosna de asilo político el Sha de Irán
4- En los Hechos De Los Apóstoles, se nos dice que «Hay que obedecer a Dios antes que a los hombres» (5: 29). Cuando hay contradicción entre por una parte, la Ley de Dios que dice que así sea obedeciendo órdenes superiores, nos dice que no debemos cometer injusticias, torturar y hacerle daño a los demás, y por la otra, una orden de un superior humana de por ejemplo un superior militar jerárquico en la que se ordena cometer injusticias, matar y hacerle daño a los demás, debe prevalecer la ley de Dios, ahora bien, en este caso, lo que la recta moral obliga, es la objeción de conciencia:
Si por ejemplo a un soldado lo obligan a reprimir inocentes, su deber moral es desobedecer: no obedecer la orden de disparar ya que prevalece el V Mandamiento de la ley de Dios: “no matarás”.
Nótese que no estamos diciendo que la sociedad debe permitir vandalismos, saqueos, abusos, violaciones, etc; la sociedad tiene derecho a defenderse y los órganos de seguridad del estado como por ejemplo la policía, tienen que defender y proteger la vida y los bienes de sus ciudadanos; pero en este último caso estaríamos hablando del derecho a la legítima defensa pero este no es el caso que aquí estamos tratando sino el caso de cuando hay abusos y violación es de derechos humanos tal cual hubo en la época de Pinochet
5- El Catecismo Universal De La Iglesia Católica es muy claro y no deja lugar a dudas:
2258 “La vida humana ha de ser tenida como sagrada, porque desde su inicio es fruto de la acción creadora de Dios y permanece siempre en una especial relación con el Creador, su único fin. Sólo Dios es Señor de la vida desde su comienzo hasta su término; nadie, en ninguna circunstancia, puede atribuirse el derecho de matar de modo directo a un ser humano inocente” (Congregación para la Doctrina de la Fe, Instr. Donum vitae, intr. 5).
2259 La Escritura, en el relato de la muerte de Abel a manos de su hermano Caín (cf Gn 4, 8-12), revela, desde los comienzos de la historia humana, la presencia en el hombre de la ira y la codicia, consecuencias del pecado original. El hombre se convirtió en el enemigo de sus semejantes. Dios manifiesta la maldad de este fratricidio: ¿Qué has hecho? Se oye la sangre de tu hermano clamar a mí desde el suelo. Pues bien: maldito seas, lejos de este suelo que abrió su boca para recibir de tu mano la sangre de tu hermano” (Gn 4, 10-11).
2260 La alianza de Dios y de la humanidad está tejida de llamamientos a reconocer la vida humana como don divino y de la existencia de una violencia fratricida en el corazón del hombre:
«Y yo os prometo reclamar vuestra propia sangre [..] Quien vertiere sangre de hombre, por otro hombre será su sangre vertida, porque a imagen de Dios hizo él al hombre» (Gn 9, 5-6).
El Antiguo Testamento consideró siempre la sangre como un signo sagrado de la vida (cf Lv 17, 14). La validez de esta enseñanza es para todos los tiempos.
2261 La Escritura precisa lo que el quinto mandamiento prohíbe: “No quites la vida del inocente y justo” (Ex 23, 7). El homicidio voluntario de un inocente es gravemente contrario a la dignidad del ser humano, a la regla de oro y a la santidad del Creador. La ley que lo proscribe posee una validez universal: obliga a todos y a cada uno, siempre y en todas partes.
2268 El quinto mandamiento condena como gravemente pecaminoso el homicidio directo y voluntario. El que mata y los que cooperan voluntariamente con él cometen un pecado que clama venganza al cielo (cf Gn 4, 10).
Si se pudiere resumir los 5 cánones antes dichos en una frase que sería la siguiente:
Cometen un pecado que clama al cielo tal cual como cuando Dios le reclamó a Caín "¿Qué has hecho? Se oye la sangre de tu hermano clama a mí desde el suelo". Génesis 4: 10.
Por otra parte, si alguno cree que los X Mandamientos de la ley de Dios son un cuento de hadas, una fábula o una elucubración fanático-religiosa, en consecuencia, que medite en lo que viene a continuación:
El desobedecer órdenes de matar, está contemplado en el Estatuto de Roma, fue suscrito por Chile y por lo tanto es ley de la República Chilena, el Estatuto de Roma tiene 3 aspectos que hay que resaltar:
A) Las violaciones de derechos humanos son crímenes imprescriptibles.
B) Las violaciones de derechos humanos son de jurisdicción universal.
Es decir, son susceptibles de ser juzgados los delitos de lesa humanidad tal cual los cometió Pinochet, que se cometen en cualquier parte del mundo y pueden ser juzgados, no solo en Chile sino en cualquier otra parte del mundo en que se aplique el Estatuto de Roma, que ya son muchos países.
C) No es admisible la defensa que se basa en el argumento de “la obediencia debida”.
Es decir: al soldado que reprime no le valdrá para nada decir que obedeció “las órdenes de su teniente”, ni al teniente que obedeció “las órdenes de su capitán”, ni al coronel “las órdenes de su general”.
No olvidemos que Augusto Pinochet estuvo preso en año y medio en Londres, por los hechos antes descritos y que también por las razones políticas antes descritas fue devuelto a Chile y para salvarse de la prisión en Chile se vio obligado a invocar lo que no respetó cuando fue presidente de Chile, como fueron “razones humanitarias” por motivos de vejez y enfermedad y como antes dijimos, Pinochet alegó derechos humanos que no respetó.
Que los que actualmente reprimen y siguen violando derechos humanos en varias partes del mundo, se vean en el espejo de Pinochet.
Es deber moral de los que reciben órdenes de villar derechos humanos, el aplicar la objeción de conciencia para abstenerse de asesinar y reprimir, tanto la objeción de conciencia religiosa que vimos antes, como la civil que acabamos de ver.
Simón Bolívar, Libertador de Venezuela, pero también muy querido y admirado en Chile, fue muy duro con este tema ya que dijo lo siguiente:
“Maldito sea el soldado que dispara contra su pueblo”
6- Chile ha ido resolviendo sus problemas y profundizado en su nueva democracia. Sin embargo todavía tiene heridas que aún no han terminado de cicatrizar:
Dichas heridas para ese momento aún no cerradas, se vieron en los funerales de Pinochet y pareciera que actualmente se están volviendo a ver en los actuales casos de vandalismo, saqueos y violencia de todo género, contra el gobierno legítimamente constituido del presidente Sebastián Piñera, violencia que obviamente está teledirigida, financiada, preparada y estimulada por inconfesables foráneos a la actual república democrática chilena
Un gran amigo dice que “Chile es un país con un desarrollo, estabilidad económica y calidad de vida de sus habitantes de tal magnitud, que podría ser la envidia de muchos países del llamado primer mundo”. Fin de la cita
Por otra parte, por encima de las heridas, hay una democracia y una libertad que no los chilenos no deberían volver a perder nunca más, no más cadenas que cercenan la libertad
Chile poco a poco fue retornando la democracia que siempre había tenido desde hace casi ciento cincuenta años cuando nació como república democrática.
Chile supo superar la pretensión socialista marxista de Salvador Allende el fascismo-militarismo de Augusto Pinochet y también superará la actual situación de violencia preparada, financiada por intereses extraños y foráneos a los chilenos
